10 dic 2012

Vélez, un campeón de otro mundo.

Velez celebra por la obtención del título en el Inicial 2012
 Vélez paseó por Rafaela su maestría institucional, su jerarquía de club de grado, su orden, su brillo, su conquista. Es un club modelo, el mismo que de la mano de Gámez le cerró las puertas a los intermediarios, logró no contaminar el aire que se respira en Liniers, porque se puede, si Vélez lo logró se puede.
El plantel de Liniers llegó puntual al estadio, descendió de su micro con Gareca a la cabeza siempre, ese humilde y sencillo entrenador, los futbolistas detrás entregando al menos ese saludo a la ciudad que siempre le pedimos a las ilustres visitas y que no siempre eligen entregar. De pronto aparece una persona de jeans, remera negra, zapatillas negras sin hablar por celular ni querer beberse todos los flashes, pasó desapercibido, pero lo conocí, lo apunté y lo entrevisté, es Miguel Calello, el presidente de Vélez, la cabeza del modelo de exportación, habla de los méritos de Atlético de Rafaela para permanecer en una categoría donde sus rivales gastan un dinero que no tienen, habla de un Cristian Basedas distinto, habla de un Gareca emblema, habla de otras cosas, es Calello el dirigente que no se encuentra todos los días y que por Rafaela casi no se hizo ver. El último en descender del micro es German Montoya, el arquero que cedió el arco velezano a Sosa, habla de la alegría del título obtenido, cuenta de su felicidad y este humilde cronista le propone en el final de ese contacto esto de tener que sumar en el logro desde adentro y desde afuera y Montoya sorprende "me tocó salir, me sirvió, crecí mucho, aprendí a ser tolerante, a madurar, sé que podía hacer un aporte desde afuera para ser campeón", Montoya entrega una opinión impropia de nuestro fútbol, Montoya también habla de otra cosa.
Hubo un partido en el que Atlético fue digno partenaire, se animó a ponerse a la altura aunque el traje le quede grande, por eso cayó indefectiblemente ante un rival que vive de otra manera, se mueve de otra manera, se muestra como un modelo a seguir que algunos no pueden copiar y otros ni siquiera lo intentan por aquello de que el modelo no incluye tierra debajo de las alfombras. Vélez coqueteó por momentos hasta que se cansó de ello y sacó a relucir su jerarquía y superó a un Atlético en pañales en el proceso de "Burru", lo logró sin problemas. La crema se animó a intercambiar golpes con el equipo del tigre hasta que el campeón sacó la chapa, la tiró sobre la mesa y dejó claro que un abismo separa a uno de otro.
El cierre de la noche lo tuvo a Gareca hablando de cuestiones que no le permiten cerrar el ok definitivo para continuar, a Basedas hablando de su exitosa carrera como manejador del fútbol de Vélez y a Rafaela aplaudiendo a un campeón legítimo y auténtico que en la noche del último sábado pasó por Rafaela exhibiendo su corona de campeón, una corona hecha a medida del equipo de Liniers.

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